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En los últimos años, las plataformas de contenido se han enfocado principalmente en la publicidad como fuente principal de monetización, dejando de lado tres variables que están evolucionando rápidamente: propiedad, transferencia y comunidad.
La propiedad del contenido es fundamental, ya que permite que el creador sea dueño de sus creaciones y tenga el control sobre su distribución y uso. Además, el contenido puede ser transferido, regalado, exportado y representar un valor. Por otro lado, las comunidades que se forman alrededor de ideas, movimientos o marcas, necesitan un espacio donde se sientan identificados y con pertenencia, alrededor de un valor.
Para abordar estas variables, FRQTAL es una app que permite a los creadores ser dueños de sus creaciones. Aquí, la publicidad no es el principal eje de monetización, sino que se centra en el valor de las llaves que los usuarios compran para acceder al contenido. Así, se crea una comunidad en torno a las creaciones de los artistas y se les da el control sobre su propiedad intelectual, lo que les permite transferirla, regalarla o exportarla, y generar un valor a partir de ella. En definitiva, FRQTAL representa una alternativa innovadora para los creadores que desean tener mayor control y generar valor a partir de sus creaciones
En nuestra plataforma, en lugar de utilizar NFTs convencionales, utilizamos FNFTs. La principal diferencia entre ambos es que en el caso de los FNFTs, son como un contenedor del valor en criptomonedas, lo que le da una valor tangible;
En el caso de los NFTs, la venta se realiza de persona a persona a través de la blockchain, y el valor de la siguiente venta depende de la descripción de compra de una persona, sumado a un valor virtual del mercado. El capital de la compra pasa directamente al usuario que vendió el NFT, y el comprador recibe el valor (el NFT) directamente en su wallet. Este activo tiende a incrementar su valor conforme al número de transacciones que tenga en su historial.
En cambio, con los FNFTs el valor esta relacionado directamente con el capital que contenga el FNFT. Este valor es real y está en dentro del FNFT. El capital de la compra pasa directamente al pot de staking para generar rendimientos para el nuevo dueño y el creador, y la propiedad cae directamente en la wallet del comprador. De igual manera, el valor de los FNFTs también tiende a incrementar conforme aumentan las transacciones en su historial.
Nuestra plataforma no es solo una aplicación, sino un ecosistema que busca unir el mundo de la tecnología blockchain con los contenidos, marcas y productos tradicionales.
En cada conexión que se realiza dentro de nuestro ecosistema, nuestra compañía cobra una tarifa por transaccionar el contenido. Los activos digitales del usuario son el eje central de nuestro ecosistema y a través de ellos generamos valor como empresa, cobrando tarifas por las transacciones realizadas dentro de la aplicación.
En resumen, nuestro modelo de negocio se basa en crear un ecosistema de APP y de protocolo, donde los usuarios puedan transaccionar contenido y generar valor económico a través de los activos digitales.
En resumen, la principal diferencia entre NFTs y FNFTs es que estos últimos tienen todo o parte del costo de venta dentro de ellos, generando regalias en el staking del protocolo para el comprador y el creador, mientras que en los NFTs el valor depende de la descripción de compra y del valor virtual del mercado.
Utilizamos nuestra App como portal y los activos digitales como llaves para acceder a contenido en diferentes formatos como audio, video, imagen y texto. Cada uno de estos activos tiene un valor monetario que se determina en cada compra de los FNFTs correspondientes. Cada FNFT o llave, que tiene un valor monetario, genera una regalía mensual tanto para el usuario que compró la llave como para el emisor del contenido.